jueves, 4 de diciembre de 2014

El riesgo de estar solo en Europa

La Unión Europea es un ente supranacional que desde el Tratado de Maastricht ha ido configurando una línea muy marcada en sus políticas, la cuales no se han atrevido a cuestionar los principales grupos parlamentarios en Europa: socialdemócratas, conservadores y liberales; o si lo hicieron en sus inicios han acabado sucumbiendo ante la doctrina Europea, caso de François Hollande, quien se postuló en contra de las recetas de austeridad que promovía Angela Merkel, y ha terminado quitando de Ministro de Economía francés a Arnaud Montebourg crítico confeso del liberalismo social que impera en la Unión, para poner a Emmanuel Macron partidario de derogar las 35 horas y quien se plantea que la acumulación de derechos de trabajadores puede ser un obstáculo para los desempleados.

Ante este contexto europeo la llegada de nuevas formaciones políticas que quieran aplicar medidas reformistas pueden encontrarse con dificultades a la hora de su implementación por no estar dentro de la harmonía política existente en el Parlamento Europeo. Esto es algo que perciben las nuevas formaciones de izquierdas que están surgiendo, en especial en el Sur de Europa, donde destaca Syriza, por su gran representación en el Parlamento griego (71/300) y por ser el líder en intención de voto para hacerse con el gobierno en 2015, la formación fundada en su origen como una coalición de partidos de izquierda. Su líder Alexis Tsipras ha estado recientemente en España buscando solución al problema de jugar en territorio hostil dentro del Parlamento Europeo. Tsipras se ha reunido con dirigentes de Izquierda Unida y de Podemos, con la intención de postular una candidatura conjunta entre las dos formaciones para las generales de 2015, con el objetivo de hacerse con el poder. El líder de la formación griega tiene en mente aquello que en el siglo XX promulgaba Lenin, que la revolución tenía que ser global para que las dinámicas de sistemas exteriores no hagan caer el tuyo. Si bien un cambio global es inimaginable actualmente sí que hay que buscar aliados para configurar un cambio en la correlación de fuerzas dentro de la Unión Europea, con esta voluntad estas tres formaciones han llegado al acuerdo de incrementar los lazos de coordinación en los parlamentos nacionales y el europeo

La lógica de la izquierda en poco meses ha cambiado de manos de Podemos. El discurso ya no va dirigido a hacer oposición al partido gobernante sino que está encaminado en hacer propuestas de gobierno, esto se percibe en el giro discursivo de la formación con secretariado general de Pablo Iglesias los cuales han dejado de banda unas propuestas más radicales caracterizadas por ser amplias y difusas, para pasar a proponer unas medidas más concretas con un alcance más realista, han aparcado la revolución impracticable dentro de la Unión Europea por una reforma económica y política en ésta. Esta metodología es más propia y acertada para convertirte en un catch all party, ya que hay elementos del capitalismo que actualmente ya son impenetrables porque la población los percibe como algo inherentes a su forma de vida; en cambio hacer frente a la austeridad y poner medidas contra la distancia entre clase política y sociedad están mejor percibidas por la sociedad europea.

Al riesgo de jugar tú solo a un estilo contrario al de la Unión Europea no es indiferente Podemos, son conscientes, como manifiesta Pablo Iglesias en su programa fort apache , del peligro que puede conllevar este hecho tanto dentro de España como en plano supranacional. La amenaza de que medios de comunicación, compañías multinacionales o fondos de inversión se giren contra tu gobierno para tumbarte, con el fin de hacer volver la estabilidad política que comporta la homogeneidad doctrinal europea que favorece a sus negocios, es un factor a tener muy en cuenta. Por eso el planteamiento de una alianza de izquierdas en el Sur de Europa se les plantea como algo fundamental para contrarrestar el poderío no solo de las políticas alemanas sino de todos aquellos países que las secundan, para así retomar un asalto más del viejo combate entre Europa del norte vs la del sur, pero esta vez equiparando las velocidades solo que con diferentes conductores.


sábado, 8 de noviembre de 2014

La necesidad del 10N

El agotamiento del debate público sobre el 9N ha convertido en que este día sea esperado como uno de los más ansiados de la historia reciente de Cataluña, no sé si tanto por su repercusión a la práctica sino por la necesidad de cambiar el marco sobre el que giraba hasta este día el proceso soberanista, y así empezar a elaborar un plan que vaya más allá de la fecha fijada, que a la larga se ha visto que fue un fallo estratégico porque limitó en espacio temporal la hoja de ruta.

Hemos llegado al 9N quizás con un escenario y circunstancias que nadie en Cataluña quería por su poca viabilidad. Lo que vaya a suceder el 9N sin ser lo que Artur Mas tenía en mente, va a ser al único que le sirva para cumplir con su promesa de convocar una consulta, y aplazar hasta las elecciones el juicio de la sociedad catalana sobre la dirección que ha llevado de este tema. El proceso participativo que se va a celebrar gozará de relevancia internacional por su movilización social porque pondrá de manifiesto la voluntad de gran parte de la población de Cataluña, se estima que el 80%[1] quiere votar la relación que deben tener con España. Pero en cambio dejará entrever la carencia de los métodos empleados, hablar de este proceso como consulta es faltar al rigor, este acto del 9N que se sustenta por la gran voluntad e implicación de los voluntarios de la Asamblea Nacional de Catalunya no cuenta con criterios legales básicos para su reconocimiento, tiene fallos de: neutralidad institucional, falta de periodo para el debate donde se postulen las diferentes opciones con igualdad y no discriminación, y mecanismos para garantizar la fiabilidad de la votación y recuento de votos.

Desde España siguen mirando a este proceso como si fuera el capricho de cuatro independistas con los que llegó tarde la voluntad del ministro Wert de españolizarlos. Y esto va mucho más allá cuantitativamente, sobretodo cada vez que un miembro del Gobierno de España se pronuncia sobre el tema. Este Gobierno ha hecho un claro abuso de poder que atenta contra la separación de poderes, ya bastante difusa en España, utilizando al Tribunal Constitucional como un órgano de poder más para tumbar la convocatorias de consultas que salían desde el órgano legislativo de Cataluña. Con estos hechos hemos llegados a un 9N donde parte de la sociedad catalana tiene miedo a posibles represalias jurídicas y/o administrativas por ser participe en el acto ya sea como voluntario o como simple votante, potenciado por el traspaso de toda responsabilidad de Mas a los voluntarios. Este sentimiento por vincularse o participar en unas votaciones jamás se pueden dar en un país democrático, quizás el Gobierno del Partido Popular deba pasar un control parlamentario y judicial por haber cruzado ciertas líneas democráticas, algo de lo que tanto acusan a dirigentes políticos catalanes. 

Hacer comparaciones radicales es inherente a los extremistas de cada bando, aquellos que tienen másters en hacer relaciones absurdas entre aquellos que son opuestos a su ideología con los nacionalsocialistas alemanes que se alzaron con el poder en 1933. En cambio sí se puede afirmar que este proceso ha dividido o al menos posicionado de una manera más clara en el eje nacional a la sociedad catalana. Esta realidad no tiene por qué entenderse como negativa sino como una materialización del principio causa-efecto que surge del nacimiento de cualquier debate político, en este caso de la relación Cataluña-España a raíz de ciertos conflictos políticos, del cual se marca como punto de partida la sentencia del Tribunal Constitucional contra l’Estatut de Catalunya.

Aunque parezca difícil de imaginar a día de hoy después del 9N hay vida, y el proceso seguirá ocupando portadas hasta que no haya voluntad desde ambas partes por negociar una fórmula para elaborar una consulta que sea reconocida internacionalmente, y donde cada opción a la pregunta pueda elaborar su proyecto: de país, de federalismo o de autonomía. Sin olvidar mientras tanto que los problemas económicos, sociales e institucionales siguen su curso independientemente a este debate y que no hacerles frente es una omisión de responsabilidad, así como pensar que la resolución de este tema arregla todos los demás.  

Espero que el 10N no nos tengamos que avergonzar de pertenecer a un país,  que no es capaz de poder sacar adelante un proceso participativo que tiene que ser amplio e inclusivo, o que no sabe respetar la voluntad popular de una parte de su población creando escenas propias de otra época histórica. 


[1] (pag.15)

miércoles, 10 de septiembre de 2014

El juego sucio en democracia

El sistema democrático de España está en peligro. Esta afirmación propia de inicios de los años 80 con un aparato militar amenazando con imponerse ante la soberanía popular, está más de actualidad que nunca. Son varios los hechos que han llevado recientemente a que se piense que el sistema democrático de España se desmorona: un poder ejecutivo secuestrado por el poder económico y financiero, una separación de poderes con las líneas cada vez más diluidas, un total rechazo a la participación ciudadana en referéndums… Pero por si había pocos factores, el gobierno del Partido Popular ha querido añadir más leña al fuego con un proyecto para reformar la Ley electoral, y no precisamente para satisfacer el viejo y justo reclamo de Izquierda Unida (y más recientemente de partidos minoritarios) ante una ley electoral injusta en el reparto de votos, sino una reforma que imponga que el alcalde con más votos sea el que gobierne.

El despegue de Podemos al cual en cada barómetro de intención de voto cada vez se le otorga unos porcentajes de votos más elevados, así como el aumento de partidos, que hasta ahora apenas jugaban un papel secundario en la política española, se le añade el declive de un gobierno al que le pasaron factura sus políticas impopulares en las elecciones europeas perdiendo 5 millones de votos. Ha motivado la necesidad en el ejecutivo de Rajoy de reformar el sistema de alcaldes a nueve meses de las respectivas elecciones, hecho que vulnera las recomendaciones del Consejo de Europa que en su capítulo 2 articulo 2.b dice:  “los elementos fundamentales del derecho electoral, y en particular, el sistema electoral propiamente dicho,la composición de las comisiones electorales y la distribución de las circunscripciones no deben ser modificados menos de un año antes de las elecciones”. Amparándose en este artículo y otras garantías democráticas que ofrece la jurisdicción europea, IU y UPyD presentarán un recurso ante el Consejo de Europa y la OSCE (Organization for Security and Co-operation in Europe) en busca de que se inhabilite una posible reforma.

Como muy bien recoge Pablo Simón en su artículo “Destellos de ilustración electoral”, Jorge Urdánoz, exparlamentario del PSN y experto en leyes electorales, hace una distinción entre manipulación y diseño electoral, siendo el primero la manera de diseñar una ley que beneficie tus intereses y el segundo la forma de disfrazar esta reforma ante la opinión pública. El Partido Popular en este caso tiene una clara intención que es mantener una serie de alcaldías importantes que peligran ante posibles pactos de la izquierda, y disfraza su reforma en la legitimidad de la opción más votada debe ser la que gobierne. Pero ni este argumento se sustenta si de representación hablamos, ya que las coaliciones de dos partidos siempre suman más votos que la candidatura ganadora por lo que si gobierna la coalición estará representando a una cantidad superior de gente. Lo que el gobierno quiere premiar es el voto individual imponiéndolo ante la voluntad popular hecho que provoca lo que muy bien refleja esta frase de Thomas Jefferson (autor de la Declaración de Independencia de EstadosUnidos de América).

Un Partido Popular que en su campaña por desprestigiar a Podemos ha utilizado entre sus recursos vincular al partido de Pablo Iglesias, y a él personalmente, con el gobierno de Venezuela al que consideran un dictadura por haber modificado las leyes para que el Partido Socialista Unido de Venezuela primero con Chávez y luego con Maduro se perpetuaran en el poder. Parece que tiene una diferente vara de medir para calificar su reforma electoral con las que modifica las reglas del juego democrático en España para mantener poder, ciertamente en busca del mismo objetivo e igual de perverso y antidemocrático.

Este no ha sido el único intento de reformar la Ley desde un ejecutivo, a las elecciones de 2004 el PSOE liderado en ese momento por Zapatero, recogía en su programa electoral una propuesta para reformar la Ley electoral (página 33 del programa). La derecha mediática presenta la actual reforma como una prolongación de la propuesta socialista de 2004, para hacer ver un que no existe consenso en tal materia. Ya que la propuesta de Zapatero aunque quizás en su espíritu tenía la similitud de que gobernara quien más votos tenía, en su forma era diferente ya que lo que proponían eran una elección <<simultánea pero diferenciada entre concejales y alcaldes>>  en un sistema a dos vueltas, por lo que cabe la posibilidad a coaliciones y no se premia exclusivamente el voto personal. Aquella reforma no se llevó a cabo ya que no gozó del consenso necesario entre partidos, en similitud con la actual propuesta, con la única diferencia que en 2004 no hubo una mayoría absoluta y actualmente sí.

Cuando se habla de esta reforma se puede calificar de muchas formas pero si se habla con propiedad, decir que no es legítima o no que no tienen derecho a llevarla a cabo es ser pocos rigurosos ya que la Constitución marca unas cuotas de escaños para cambiar un seguido de leyes, y en el caso de la Ley electoral el Partido Popular con su mayoría absoluta la cumple. Otro tema es si hablamos de ética y respeto del juego democrático, donde claramente nos encontramos con elementos que están más cercanos al juego sucio que al respeto de la democracia. Existen caso de actitudes similares como De Gaulle que variaba la demarcación de los distritos según reflejaran las encuestas para modificar el resultado final; pero en España por el momento no se había producido actitudes similares sin tener en cuenta que ya gozan de una ley electoral que con sus circunscripciones y reparticiones de escaños entre estas, les han beneficiado mucho a lo largo de estos casi 40 años de democracia tanto al PP como al PSOE, dificultando así la llegada de nuevos partidos.

Este acto de aferrarse al poder demuestra un claro pánico por la elite política conservadora ante posibles cambios en la dirección del país partiendo desde las alcaldías hasta a un posible bloque de izquierdas que pueda llegar a la Moncloa. Por eso aparte de los intentos de desprestigio a Podemos van a intentar modificar las reglas del juego para poder garantizarse el privilegio de manejar el país e imposibilitar que se levante la alfombra del país para que no se sepa que se ha escondido debajo de ella en estos casi cuarenta años de democracia.


domingo, 29 de junio de 2014

Juan Carlos aceleró, y la tercera no llegó

Parece que el resultado de las elecciones del 25 de Mayo iban en serio, el sistema bipartidista se tambalea y con él la estructura de estado forjado desde la transición. Entre estos elementos de estado se encuentra la monarquía, cuya valoración por parte de la población española es la más baja desde que fueran nombrados jefes de estado por el franquismo. Estos indicadores sociales en referencia a la opinión pública muestran estos índices en gran parte influenciados por escándalos familiares que han llevado a imputaciones de hija y yerno, que se sumaron a los ya mencionados resultados electorales europeos, esto condujo a tomar una medida de emergencia para girar el timón a tiempo y evitar el iceberg que se empieza a visualizar a lo lejos en forma de ruptura entre sociedad y estado. La acción de cambio no se hizo esperar y una semana después de las elecciones el Rey abdicaba, un hecho que no por más que meditado parecía que se hacía apresuradamente, como si el Rey tuviera en mente el eslogan republicano de: ”Juan Carlos acelera que viene la tercera”.

Pese a que los medios convencionales intenten disuadir la causa mayor de la abdicación con motivos totalmente secundarios, el nerviosismo generalizado en la elite política es palpable y este hecho lo refleja. El PSOE está en pleno proceso por buscar una nueva identidad en el siglo XXI o simplemente sobrevivir, y el Partido Popular intenta encontrar las reformas que no le hagan seguir perdiendo votantes.  Por si no tuvieran poco con sus asuntos internos les ha tocado llevar a cabo el proceso de proclamación del nuevo Rey, aunque no parece que hayan tenido muchos quebraderos de cabeza con este hecho salvo algún sector republicano del PSOE que apenas le han dejado tener cabida en la luz pública y mucho menos peso a la hora de posicionar el partido.

El proceso desde la abdicación de Juan Carlos I hasta la proclamación de Rey a Felipe VI ha sido propio de la democracia española, que no confundir con democrático. Este método se caracteriza por no consultar al pueblo nada, independientemente del tema que se trate y así sea tan relevante como la jefatura de estado o la pertenencia a un territorio, la población no tiene el derecho a votarlo, quizás piensen que después de 40 años la población todavía no esté capacitada para tomar decisiones relevantes. Gracias al bipartidismo se aprobó la ley orgánica que iniciaba el cambio de monarca, con abstenciones de nacionalistas y votos en contra de la izquierda plural; quizás en un contexto futuro donde se percibe que el bipartidismo pierde fuerza y aparecen nuevas agrupaciones que no promulgan con la defensa monárquica a ultranza, un cambio de Rey en el futuro hubiera supuesto un proceso bastante más largo y costoso para la Casa Real, así que lo pretendían evitar a toda costa.

La voluntad era iniciar un proceso rápido y lo menos doloroso posible para no seguir dañando la ya maltrecha imagen de la monarquía española, pero pese a las prisas, a lo largo y ancho de España se inició una reclamación a favor del referéndum donde decidir entre monarquía o república. Quizás porque a este movimiento republicano le pilló a contrapié la abdicación y tuvo poco tiempo para organizarse, las protestas carecieron de la fuerza que requería el momento, no tanto por falta de apoyo sino por falta de tiempo y atención de los medios. El movimiento republicano carece de una fuerza política que lo represente en el parlamento, salvo la Izquierda Plural no hay representación del republicanismo en forma de grupo parlamentario, y esto es muy relevante todavía para conseguir movilizar a la gente; ya que puedes tener el apoyo de millones de ciudadanos pero si no consigues transformarlo en fuerza política, la reivindicación carece de instrumento para alcanzar el objetivo dentro de nuestro sistema político.

La proclamación de Felipe VI siguió el curso deseado desde la Casa Real, intentando hacer de este acto una muestra de fervor patriótico haciéndolo coincidir con el mundial. Con una ceremonia más adaptada a los tiempos actuales y unas medidas de seguridad para que nada se saliera del orden previsto, Felipe se ha convertido en el nuevo rey de España. Ahora es el momento de ver si sigue la tónica de su padre y actúa como mero embajador del país, o por el contrario demuestra estar más activo en la política del país, que en buena medida es lo que se le exige desde su nombramiento, y motivo por el cual se ha adelantado su proclamación, para que sea el acto simbólico de un cambio de la política del país y un acercamiento al diálogo, sobre todo con un jefe de estado que sí habla la lengua catalana puede ser un actor de mediación aceptado entre las dos partes. Ahora habrá que ver si este papel lo sabe dirigir y los gobiernos lo saben aceptar, o simplemente acaba siendo un actor estatal pasivo ante la realidad del país.


domingo, 1 de junio de 2014

El camino de la izquierda tras las europeas

Las elecciones europeas del 25 deMayo en España dejaron pocos vencedores y en cambio pusieron sobre la mesa varios indicadores que se venían anunciando a lo largo del tiempo desde la población: desmantelamiento del bipartidismo, impulso al soberanismo catalán, desafección política, e impulso a la vez que fragmentación de la izquierda. Los dos partidos mayoritarios (PP y PSOE) no consiguieron reunir más del 50% de votos, hecho que refleja el distanciamiento de la sociedad ante ellos, esto llevo al florecimiento de diversos partidos con al menos un escaño. Por su parte, el pueblo catalán ratifico la voluntad de poder votar su futuro en una consulta, dando cerca de 1.500.000 de votos a aquellos partidos que han expresado su apuesta por que se realice el referéndum (ERC, CiU, ICV). Justo en esta comunidad el porcentaje de participación creció un 10% respecto a 2009, hasta llegar al 47,62% dos puntos más que en el conjunto de España, estos índices tan pobres han sido una tónica repetida en la mayoría de países europeos, presentando unos porcentajes muy bajos de confianza en las elecciones europeas, y en la clase política. Al principio hablaba que hubo pocos vencedores, pero a nivel estatal hubo un partido claramente vencedor, Podemos, lo que ha provocado una mayor representación de la izquierda a la vez que está más fragmentada en diversas opciones. Teniendo en cuenta que Izquierda Plural y Podemos han reunido más de 2.800.000 votos se puede considerar que la izquierda suma un número realmente a tener en cuenta como fuerza política, si a estos le sumamos la parte más progresista del PSOE, la esperanzas de cara a las elecciones de 2015 son ilusionantes para que haya un cambio de políticas tanto económicas, sociales, democráticas y laborales. Pero ¿Y después de las elecciones europeas, qué?

PSOE, renovarse o morir.

El PSOE después del severo correctivo que sufrieron en estas elecciones, que se suma a los que llevan acumulando desde 2011, parece que ha empezado a procesar que sus votantes les están pidiendo un cambio en su secretaría, y cargos más elevados, a la vez que replanteamiento de sus políticas. Así que se abre el proceso para nombrar a la nueva cúpula del partido que tiene en sus manos renovar al PSOE, o darle el último empujón hacia el barranco.

Curiosamente en el momento de la democracia donde están obteniendo peores resultados, puede ser que vuelvan a ser la llave del gobierno, y no precisamente por méritos propios sino por demerito del partido de gobierno. El PSOE no se juega solo elegir la cúpula de su partido, sino que indirectamente están eligiendo la ruta de camino en los próximos años y sobre todo a corto plazo, las elecciones generales de 2015. Las dos opciones que a vuela pluma se pueden presentar son claras y han sido planteadas públicamente por diversos sectores del partido: gobierno de unidad, pactando los elementos fundamentales de la política nacional con el PP; o frente de izquierdas fijando unas recetas de izquierda sobre las que pivotar un gobierno.

Quien más quien menos ya se ha postulado dentro del partido respecto a esta dicotomía, y es conocido que el núcleo más duro liderado por Felipe González, que goza del don de la oportunidad a la hora de pronunciarse, está por la labor de volver al poder de la mano de laderecha para que no cambie nada en este país, y poder seguir adorando a la maravillosa transición donde por casualidad ellos fueron artíficies; así lo ha hecho saber públicamente, al igual que ha desprestigiadoa PODEMOS. En cambio, existen corrientes dentro del partido con una mentalidad más abierta en contra del anclaje en el establishment político que entiende la necesidad de hacer reformas progresistas de calado a todos los niveles.

Izquierda Plural y Podemos, condenados a entenderse.

En el contexto actual ya no vale actuar simplemente como fuerza opositora al gobierno, porque esto nos ha llevado a la situación actual donde el estado de bienestar se sustenta gracias a las familias, el sistema democrático hace aguas y el poder económico esta sustraído por un establishment totalmente ajeno al control del pueblo. Con estos elementos pensar que solo con tener representación en el parlamento ya basta sería dejar escapar una gran oportunidad de tomar decisiones en la práctica. Hacer la batalla por separado era entendible en un panorama donde las posibilidades de sumar mayoría eran ínfimas, pero actualmente, esto ha cambiado tanto por la disolución del sistema bipartidista, como por el agotamiento por parte de la sociedad a estar bajo estas políticas ultraconservadoras.

La Izquierda Plural lleva una constante de crecimiento en número de votos, pero los pronósticos son que si no ha tocado ya techo electoralmente, poco le falta; bien sea por su historia, por su anclaje dogmático o por una carencia de saber llegar a un pueblo que realmente sí comparte su programa, no es capaz de aglutinar más votos. En cambio Podemos en 6 meses de vida como partido, sí ha sabido movilizar a la gente, que bien estaba totalmente desencantada de la casta política y abogaba por la abstención, o a la que necesitaba ver caras e ilusiones nuevas en otro partido.

La coalición de estos dos partidos era algo que ya se demandaba por parte de algunos sectores antes de las elecciones europeas, pero ahora viendo los grandes resultados de los dos partidos es casi una pura obligación. Aunque ahora la negociación para una posible coalición ha variado sus fuerzas, Pablo Iglesias ya no es solo el tertuliano que quiere hacer andadura política y al que Izquierda Unida como partido mayoritario le podía poner las condiciones, ahora la diferencia es solo de 300.000 votos, hecho que iguala el eje de fuerzas para configurar un frente común. En estas elecciones ha habido un clara lección en la hora de la captación de votos por parte de Pablo Iglesias a los líderes de Izquierda Unida en especial a su homólogo y el que tiene que ser la esperanza del partido por capacidad y juventud, Alberto Garzón Espinosa; Pablo Iglesias ha demostrado que en esta década hay que estar capacitado pero también hay que saber jugar en diferentes escenarios y lo mismo que puedes dar un discurso frente a gente afín a tus ideas, hay que saber batallar dialécticamente con aquellos que insaciablemente promulgan su conservadurismo en la parrilla televisiva.

Pero dejando al lado egos individuales, disputas de procedimientos y de fundamentaciones ideológicas, ahora toca poner la cara todos y darlo todo para que este país cambie de verdad. En esta andadura habrá que sentarse y ver qué camino decide elegir el PSOE, si deciden seguir alineándose con las políticas económicas de derechas como en la última legislatura de Zapatero, lo mejor será presentar un proyecto ilusionante y sus propios militantes que gran parte si son progresistas y de izquierda de verdad sabrán elegir quién les representa electoralmente. Y sumando toda esta base militante de las diversas formaciones y movimientos sociales, el cambio es más probable que nunca. La Izquierda Unida, PODEMOS.

sábado, 24 de mayo de 2014

Blog sobre Badalona

Recientemente he iniciado un blog paralelo a este, donde analizo la política municipal de Badalona. Creía conveniente separar las dos temáticas porque van dirigidas en dos direcciones diferentes y no me gustaría que este blog perdiera la esencia que tiene desde su nacimiento. Intentaré combinar la publicación en los dos blogs lo mejor posible. Pido disculpas a aquellos lectores habituales de este blog que son de fuera de Catalunya y no podrán comprender a la plenitud el otro ya que lo redacto en catalán, pero creo conveniente publicar en los dos idiomas, y esta es una gran oportunidad para llevarlo a la práctica.

Badalona es una ciudad gobernada desde 2011 por Xavier García Albiol del Partido Popular, un alcalde que sobrepasa la popularidad de su municipio, tanto por su campaña electoral denunciada por ciertas plataformas por xenofobia, como por su presencia en los diferentes medios de comunicación tanto autonómicos como nacionales. Esta ciudad del litoral catalán es la tercera más poblada de Catalunya con más de 220.000 habitantes, el gran número de población se debe en parte a la inmigración llegada en pleno auge económico del país, que consagro a Badalona como una de las ciudades con más porcentaje de inmigración en Cataluña.


Probablemente este indicador sea uno de los que más interfiere en la realidad de esta ciudad no tanto por la inmigración en sí, sino por la falta de políticas de integración que se han implementado en la ciudad. Esto ha llevado a una realidad compleja en la ciudad, que iré desgranando con artículos en el blog, con datos rigurosos y con criterio. 

domingo, 23 de marzo de 2014

La democracia nos fue infiel

La democracia ha sido definida a lo largo de la historia por diferentes autores y corrientes de pensadores, de los primeros fueron Platón y Aristóteles, los cuales la consideraron como <<el gobierno de la multitud>> y <<el gobierno de los más>>, respectivamente. Pero Platón dudaba de la democracia, y señaló algunas críticas de esta en sus reflexiones como “la masa popular es asimilable por naturaleza al animal esclavo de sus pasiones e intereses pasajeros; confiarle el poder es aceptar la tiranía de un ser incapaz de la menor reflexión y rigor”. Uniendo ésta a otra serie de interpretaciones, su pensamiento sobre este modelo de estado indica que la democracia es ingobernable, impulsa la tiranía y la inmoralidad de cada uno. Como contraposición de esta definición profunda y analítica de democracia, tenemos la fría y desapasionada que hace el diccionario de la RAE, calificándola como: “1.Doctrina favorable a la intervención del pueblo en el gobierno 2. Predominio del pueblo en el gobierno político de un estado”.

Cabe decir que cuando hago referencia a democracia, no me refiero solo a votar (derecho que considero fundamental), sino englobo el conjunto de instituciones del estado,  mecanismos de representación, funcionamiento del sistema… Aquí no entro en el estudio de ésta, sino en la visualización o sentimiento que parece tener la sociedad actualmente de ella. Para poner en situación diría que: “esta doctrina es como el estreno de un coche, al principio todo son experiencias positivas y no percibes fallo, pero con los años aparecen las averías y empiezas a dudar de que tu coche tenga los mejores mecanismos del mercado”. El título, de manera irónica, pretende transmitir el sentimiento de gran parte de la sociedad ante la democracia, basándose en la concepción histórica de este modelo como forma de gobernar, donde el poder reside en el pueblo, pero actualmente la gente no percibe que ese poder lo tengan ellos sino una élite, y no precisamente de sabios (como defendía Platón), sino más bien económica y política.

La democracia durante la guerra fría no tenía competencia, era estar dentro de la hegemonía mundial o pertenecer al bloc soviético, así que España tras la dictadura y una transición, pensando más en solucionar el conflicto de aquel momento que en el futuro, estableció una democracia electoral como en buena parte de los países neoliberales, infundiendo que era la única vía de progreso (E. Hobsbawm). Con el transcurso del tiempo la euforia democrática se fue evaporando y empezaron a surgir los problemas intrínsecos del sistema, en parte por la configuración de éste y en otra por aquellos que la han manejado. Hasta llegar a la actualidad donde la percepción de desgaste que sufre la democracia en nuestro país empieza a rozar índices preocupantes, en 2012 la valoración de la población española sobre su sistemademocrático era de 5,8; medio punto menos que en 2008. En esta disminución han intervenido diferentes factores que siguen estando a la orden del día como: la corrupción, la lejanía de los partidos, la injerencia de la Unión Europea en política nacional, el funcionamiento del poder judicial, la presencia del poder económico en la toma de decisiones políticas… 
    
Todos en mayor o menor medida percibimos los problemas del sistema en el transcurso de los días, y culpamos a los políticos actuales así como a los que forjaron el sistema. Pero esta crítica aunque no carece de razón, peca de irresponsable, si antes la sociedad no asumimos culpas. La población española quizás hasta el inicio de la crisis estaba adormecida democráticamente por el resplandor económico, limitándose a votar en las elecciones, poniendo poco hincapié en los fallos del sistema democrático. Fue con la pérdida de esta situación económica y las reformas políticas recientes que se impulsaron las voces críticas contra el sistema y el rumbo que éste está tomando: un blindamiento de los poderes estatales y fácticos, que imposibilitan la asunción de responsabilidades y el justo proceso judicial por ello. Estas reclamaciones han intervenido en el declive de la valoración democrática al cambiarse por completo la mentalidad de la gente respecto al pasado. A finales de la dictadura la gente tuvo una actitud ofensiva y ambiciosa por conseguir aquello que les había sido robado durante cuarenta años, democracia y con ella la libertad; pasado otros cuarenta años de aquel momento y acostumbrados a vivir en los logros de aquel reclamo popular, nuestra actitud es defensiva, ya que luchamos por no perder los elementos de nuestro sistema, aunque empiezan a surgir algunas voces que introducen en el vox populi elementos que podrían enriquecer nuestra democracia.  

Aquel elemento reclamado, más directamente relacionado con la <<democracia electoral>> de la que nos habla Hobsbawm, es una mayor participación ciudadana en la toma de decisiones, tanto en la posibilidad de que las proposiciones de ley ciudadanas tengan un cauce más fluido como un mayor número de referéndums, una práctica muy poco extendida en nuestro país; este mecanismo debería estar bien regulado para no caer en una saturación de éstos, como en el caso de Suiza. Ante una mayoría absoluta como la actual parece más necesaria que nunca esta posibilidad, ya que la la toma de decisiones es unilateral, confundiendo por parte del gobierno mayoría absoluta con absolutismo.

Quizás por el contexto actual que vivimos también se requiere un refuerzo de la separación de poderes para acercarse aquello que planteaba Rousseau. El poder judicial es percibido como una institución donde cada partido intenta influenciar con más fuerza que el resto, este hecho tiene su máxima expresión en el nombramiento de los jueces del Tribunal Constitucional y Consejo General del Poder Judicial, donde los partidos designan a parte de sus miembros. Junto con esto, eliminar los indultos parece fundamental, este es un mecanismo que ya no tiene cabida en una democracia del siglo XXI y el único uso que se le está otorgando ha sido el de librar de las condenas a gente afín al partido o la que anteriormente había realizado algún favor a este.

Si la democracia actual de España no se renueva y mejora, la desafección con el sistema va a perdurar, y el problema es que no hay ningún sistema alternativo que haya tenido éxito. La democracia sin duda es el camino para el progreso y la libertad, pero es un camino que necesita irse restaurando, ya que por sí solo no se regenera. Pero en esto Platón parece que no se equivocaba el hombre se mueve por sus intereses personales, y hasta que eso no cambie y se mire el beneficio colectivo nuestra democracia seguirá perdiendo crédito, y éste como todo recurso no es infinito. 


viernes, 14 de marzo de 2014

Ucrania, y el cinismo occidental


En los últimos días corren ríos de tinta sobre un país al este de Europa, Ucrania. Un conflicto en el que cada uno parece tener su opinión bien fundamentada y la pretende defender hasta el final independientemente de cómo se conduzca el conflicto, por lo que las opiniones sobre este suceso parecen que se inclinan más por la vertiente ideológica que por la analítica, primando por delante el enfoque dogmático al humanista o ético. Así que si pretenden leer un texto más para reforzar su pensamiento respecto a la postura que mantienen ante el conflicto pueden dejar de leer aquí. Lo que pretendo es reflejar la triste situación de un país que se ve abocado a una Guerra Civil por el orgullo de las potencias mundiales por ejercer y demostrar su fuerza, llámese: países de la Unión Europea, Estados Unidos o Rusia.

Respeto que todos tengamos opinión amparada por nuestras concepciones ideológicas, pero estas se han de fundamentar con cierta coherencia y sobretodo humanidad. Quizás el siglo XXI y la Revolución tecnológica nos ha llevado a esto, al poder opinar por todas las vías interactivas posibles desde nuestro hogar sobre un conflicto armado que tiene un presente crudo pero un futuro que es mejor no vaticinar,  si miramos esta realidad parece ciertamente cínico que podamos hacer juicios de valores sobre la población que vive en un territorio donde cada día que despierta no sabe que será de su país, ciudad o casa; sobre todo cuando los actores internacionales que intentan influir en el escenario son como menos sospechosos de moverse por intereses, y no sean la panacea de los sistemas económicos ni democráticos.

Desde el origen de las revueltas en la Plaza “Maidán” que han dado paso a este conflicto se ha intentado legitimar o a la inversa según el prisma con que se viera toda la evolución del proceso, para ello las imágenes o viñetas empezaron a inundar la red substituyendo a los históricos cronistas a pie de campo, esto da paso a una jauría para ver quién publica las imágenes más impactantes o más simplificadora con la voluntad de que al visualizar esta te sientas un ciudadano realizado e informado de un conflicto que se remonta más allá de la disolución de la URSS, y que tiene su esencia en la convivencia de diferentes entidades étnicas dentro de un mismo país: 77,8% Ucraniana, minorías rusas, bielorrusas y rumanas. Estas nunca vivieron ningún proceso de integración por parte del estado y sumándole una gran desafección hacia su gobierno, ha desembocado en la ebullición de un conflicto en dos direcciones: vertical dirigido hacia el estado, y horizontal entre algunas etnias.

Conocer la historia casi siempre resulta de gran ayuda para conocer el presente, y cuando se recorre la hemeroteca de este país a lo largo del siglo XX se vislumbra un país maltratado, en gran parte por su posición geográfica que la convierte en un gran punto estratégico para las potencias, o para aquellos líderes con voluntades imperialistas, en esto comparte experiencias con su vecino del noroeste, Polonia. Ucrania paso una gran época de penurias, conocida como la hambruna, una crisis agrícola gravísima en 1932 y 1933 donde se calcula que llevó a la muerte de siete millones de habitantes del país durante el régimen de Stalin, en lo que algunos historiadores consideran como un genocidio encubierto (o Holodomor), ya que Ucrania es uno de los mayores proveedores agrícolas de toda Europa, por lo que una crisis alimentaria con sus característica resulta inconcebible sin voluntad estatal. Unos años después les tocó sufrir la impetuosa marcha de Hitler hacia el este, una vez conquistada Polonia llegaron a territorio ucraniano donde después de duras batallas perdieron la vida más de 600.00 ucranianos que formaban parte de los dos bandos. El ejército rojo, gracias al apoyo de población nativa en el territorio, consiguió resistir pasándose a conocer a Kiev como “Ciudad Heroica”. Por si la hambruna o ataques militares no fueran suficientes en 1986 Ucrania sufría el peor accidente nuclear de la historia junto al de Fukushima de 2011; durante una prueba en la central de Vladímir Ilich Lenin se produjo un sobrecalentamiento del reactor nuclear produciendo una explosión de hidrogeno, hasta el día de hoy ha sido imposible concluir el número de víctimas que produjo la radiación pero los efectos todavía actúan en población contaminada, además de dejar una ciudad fantasma que hasta el presente continua inhabitada. 

En estos momentos todos hemos oído escuchar del conflicto que agita Ucrania y de sus actores principales, pero la desinformación corre por las calles ya que las noticias están politizadas sea para un bando o el otro. No pretendo ser la voz objetiva del conflicto, porque no creo en la objetividad en política o periodismo. Pero me sorprenden los puntos de vista que se están dando. Que Estados Unidos ha dado apoyo financiero y diplomático a las revueltas originadas en Kiev es algo más que contrastado (el tiempo dirá si también militar), con la voluntad de inestabilizar el panorama internacional y sobretodo tender un pulso a Rusia con un punto geoestratégico como es Ucrania, por donde circula la mayoría de conductos de Gas Natural que provienen de Rusia a Europa, por lo que obviamente la respuesta del gobierno de Putin no iba a tardar en llegar, pero pocos se imaginaban los movimientos armamentísticos que llevaría a cabo el país euroasiático con desplegamiento de flotas navales y cuerpos militares estableciendo bases militares en Crimea, un territorio donde el 70% de la población se siente únicamente rusa, por lo que Rusia debe garantizarse mantenerlos sentimentalmente vinculados al país. Mientras tanto, la Unión Europea una vez más hace pública la carencia de una política exterior común, ya que por el momento continúan sin realizar ningún movimiento destacable en un conflicto que hay que recordar que la erupción de la protesta fue por la voluntad de una parte de ucranianos de incorporarse a la unión. Pero este silencio se debe al interés que tienen la mayoría de miembros de la unión de no molestar a Rusia, ya que las inversiones de sus turistas tienen un papel importante en la recuperación de la economía de buena parte de estos países europeos, entre ellos España.  
Aunque se ha hablado de geopolítica y del lugar que ocupa Ucrania en las estrategias de los diferentes actores que concurren en este conflicto, no es el único factor, sino que nos encontramos con los sentimientos tanto de pertenencia por parte de la población autóctona, como de orgullo por parte de los países. Vayamos por partes, el pueblo de Crimea se siente ruso, por lo tanto es difícil luchar contra esa voluntad de volver a pertenecer a sus orígenes, y luego aparece el orgullo ruso de poder recuperar un territorio perdido por resoluciones históricas. La Unión Europea parece por la labor de concederle Crimea como mal menor para satisfacer el hambre de potencia territorial rusa en Europa, pero quizás la prevención en este caso no sea la mejor opción ya que Rusia se puede lanzar a por territorios del conocido como cinturón de seguridad entre Europa y su territorio, donde la población de algunas localidades de esta zona siguen considerándose rusas. El primer país al que siempre le toca sufrir cuando hay revuelo en esa zona es Polonia, el cual tiene municipios en el este de su territorio con estas características. Pero no es el único que puede sentir la presión rusa.

Europa se juega la estabilidad en su zona y activar los aires imperiosos de Rusia es lo que menos conviene a la Unión, tanto económicamente como diplomáticamente, esto truncaría el objetivo de la UE desde que permitió la adhesión a la eurozona de antiguos miembros de la URSS, el inhabilitar una, posible reconstrucción de esta. Rusia por su banda parece que ha pasado de una postura defensiva en la que no quería perder puntos geoestratégicos que tenía más o menos estabilizados, a una ofensiva donde pretendería adhesionarlos de nuevo. En esto tiene mucho que ver Putin, quizás el líder ruso con más fuerza desde la disolución de la URSS  y desde luego el que más añora el poder del imperio soviético, aunque su ideología diste mucho de ser equiparada a la soviética.

Todos habremos escuchado desde el inicio del conflicto una serie de posibles consecuencias, y quizás ninguna positiva para la población de Ucrania, en quien parece que nadie piensa. Las consecuencias reales solo el tiempo lo dirá pero la injerencia de potencias extranjeras en el conflicto hace presagiar lo peor, ya que si ha habido un momento más cercano al resurgimiento de la Guerra Fría desde el final de esta, sin duda sería el actual, aunque variaría la confrontación ya que no sería entre dos sistemas económicos, sino más bien en una lucha de poder y hegemonía territoriales. El inicio de este posible conflicto estará en ver cómo se gestiona el tema de la energía, ya que el gran factor de coacción y presión entre Rusia y Europa es el suministro de esta.

viernes, 7 de marzo de 2014

Articulo en Cercle Gerrymandering

Hace varios días, sin duda más de los que me hubiera gustado, no publico ningún artículo en el blog, pero esto no significa que haya dejado de escribir, al contrario sigo con más voluntad que nunca. El motivo es que el último artículo que escribí me pareció interesante enviarlo a un portal de politólogos Cercle Gerrymandering con la finalidad que tuviera más visitantes que en mi blog, es un artículo más analítico sobre una problemática del país, y este portal me dio la oportunidad de publicarlo.

Este trata el tema de las energías y en especial entro a fondo con la criba por parte del Gobierno de Mariano Rajoy contra las renovables, indicando la legislación aprobada y la que está pendiente de ello, para dificultar que este sector pueda tener un protagonismo mucho más fuerte en nuestra economía, teniendo en cuenta que España reúne todas las condiciones necesarias para convertirse en la gran potencia generadora en este sector, resulta una actitud suicida ante la negativa de invertir en el futuro. Actualmente las empresas renovables disfrutan de buena salud gracias al trabajo que realizan en otros países decididos en apostar por esta energía.

En contraposición las compañías energéticas tradicionales siguen incrementando su ingresos gracias a no tener una competencia real en la producción de energía, mientras que en su órganos directivos encontramos miembros políticos que han mantenido la hegemonía de estas empresas.


El articulo está en catalán, me gustaría poderlo traducir para que tuviera más difusión pero por motivos de licencias me resulta imposible. En este post quisiera agradecer a Cercle Gerrymandering por la oportunidad y el gran equipo riguroso por el que está formado. 

viernes, 7 de febrero de 2014

“La culpa es del otro”

Hace dos semanas corrían ríos de tinta tras la dimisión del Presidente del F.C. Barcelona Sandro Rosell, tras la transferencia de Neymar una de las más comentadas de las últimas décadas con cifras y cláusulas hasta aquel momento desconocidas, y una denuncia por parte de un socio que llevó a Sandro Rosell a estar imputado, el hasta aquel momento presidente decidió dejar su mandato presentando su dimisión irrevocable. En este post no pretendo entrar en tal fichaje, ni en el proceso jurídico abierto, simplemente por una cuestión muy clara, no me parece realmente relevante en mi vida diaria. Lo que sí quiero sustraer de aquí es el acto de la dimisión, una acción muy poco practicada por políticos, aunque no por faltas de suplicas de los ciudadanos. Existiendo este reclamo popular para que altos cargos presenten su dimisión, me ha extrañado las suposiciones populares que se le han atribuido a que lo haya hecho Rosell, conjeturando que <<si dimite es porque algo habrá hecho, o algo tendrá que esconder>>, quizás este voz populi se deba al carácter intrínseco que tenemos todos los ciudadanos de este país de grandes opinadores indiferentemente de la materia que se trate, ya que en el caso de que no lo hubiera hecho también tendríamos juicio de valor diciendo <<que se agarra al cargo>>.

El acto de dimitir es quizás la culminación de la asunción de responsabilidad en un puesto, y aquí radica uno de los grandes problemas como sociedad que tiene este país, en el “ADN” de los españoles podemos encontrar grande virtudes pero la responsabilidad individual no es una de ellas, tenemos poco interiorizadas nuestras funciones como ciudadanos pero sobretodo a nivel profesional, así que a la mínima de turno intentamos escurrir el bulto hacia el de al lado (por supuesto cabe decir que el grado de irresponsabilidad está más presente en algunos individuos que en otros), esto se refleja en que cuando hablamos de algo que creemos que no debería ser así siempre hablamos en tercera persona, donde no nos hacemos participes, como por ejemplo quién no ha escuchado “Es que la gente no sale a la calle por más recortes que hayan”, por supuesto esa persona no se incluye en el colectivo de ciudadanos pasivos.

Personalmente creo que carecemos de esta facultad por el modelo empresarial que ha transcurrido a lo largo de la historia de este país, la mítica figura del encargado ha dejado poco pie a la responsabilidad individual de los trabajadores, y en cambio ha potenciado la deslealtad entre compañeros, premiando al chivato y desprestigiando al trabajador autosuficiente. El problema es que este puesto de encargado está mal entendido,  se ha implementado como un mero supervisor más propio del control de presos, que del líder que se pone a dirigir haciendo las mismas funciones que los trabajadores. 

Esta carencia de responsabilidades no se refleja exclusivamente a nivel personal sino que a nivel institucional o burocrático es todavía, si cabe, más evidente. La organización territorial de nuestro país es un instrumento que potencia este comportamiento, ante un mapa administrativo (Estado, Comunidades Autónomas, Diputaciones y Municipios) con duplicidad de funciones y con una hiperrepartición de funciones que facilita la debilidad en la asunción de obligaciones. Estos entes administrativos en muchos casos por desinformación de su propias funciones no asumen sus propias responsabilidades y esto da lugar a situaciones donde todos nos habremos visto reflejados alguna vez, en las que vamos de “ventanilla en ventanilla” sin que nadie realice el procedimientos administrativo correspondiente sin antes haber escurrido responsabilidades ante otros entes, hecho que provoca que el usuario se sienta más participe de un sketch de Monty Paython antes que del correcto funcionamiento de la administración pública.


He escrito sobre esta facultad de la cual carecemos en el país, porque algo que me llegó durante la carrera de Ciencias Políticas es que para el buen funcionamiento de los entes públicos (aunque igualmente aplicable a empresas privadas) hay que transmitir responsabilidades a los empleados y que estos las interioricen como parte esencial de su trabajo, y para fortalecer este procedimiento por supuesto tiene que a ver un buen director que sepa atribuirlas, y  sobretodo que sepa juzgarlas como es debido, porque lo que no puede seguir ocurriendo es que en una fallo de empresa o administrativo, quien responde antes sus actos sin desimir responsabilidades sea quien acaba mal parado ante el que se esconde entre el grupo.

sábado, 25 de enero de 2014

El negocio de las redes sociales y portales de búsqueda.

En pasados posts hablé de los efectos que ha traído internet al mundo de la información, quizás en el terreno donde más influye la desinformación que expliqué, sean las redes sociales, las cuales son las actuales plazas mayor de cualquier pueblo de siglos pasados, donde el primero en contar la noticia sentía una gran satisfacción al ver que se propagaba lo explicado, sin importar la veracidad de esto. El problema es que la información que surge en redes sociales no se queda solo en tus conocidos más cercanos como en aquella época, actualmente nos encontramos con un flujo de publicaciones inimaginables hace unos años, que da la vuelta al mundo en apenas horas.

Las redes sociales han tenido un crecimiento exponencial en apenas diez años, tanto en número de usuarios que la utilizan como en el valor económico como empresas, tanto Facebook, Twitter y Google cotizan en bolsa, y aunque su rendimiento en el mercado bursátil no es todo lo bueno que se esperaba, el capital de sus empresas sí ronda valores astronómicos propios de grandes empresas con décadas de beneficios. Ahora bien si sus servicios son gratuitos ¿de dónde sacan estas empresas beneficios? Ellos alegan que gran parte de su enriquecimiento se debe a la publicidad, pero realmente una empresa no hace una fortuna solo con este recurso económico. El problema es que la fuente de ingresos mayoritaria es mucho más oscura como para hacerla pública. Solo hay que pensar en el único recurso del que disponen a partir de hacernos usuarios o buscar en sus portales, nuestra información (publicaciones, datos de registro, datos confidenciales, conversaciones privadas…). Actualmente la información de las personas es uno de los bienes más cotizados, tanto por empresas privadas como por gobiernos, cada una la requiere para distintos fines, pero muy poca es utilizada para el beneficio de la propia persona.

Todas estas empresas de nueva generación han reconocido la venta de información de  sus usuarios a distintos gobiernos que la solicitan alegando motivos de seguridad, pero el uso que hacen de ella va más allá de la simple vigilancia, la cual llega a convertirse en un estricto control de la intimidad indiscriminadamente. En cambio dichas empresas son más reticentes a la hora de reconocer la venta de información de todas sus cuentas a empresas privadas, pero este hecho se demuestra en la cantidad de fondos privados que reciben de diversos sectores empresariales: aseguradoras, clínicas privadas, agencias de viajes, medios de comunicación… Todos estos sectores realizan inversiones en Facebook, Twitter o Google buscando unos beneficios que se materializan de dos formas, la primera es la lógica y directa, es el típico rendimiento económico del cual obtienen beneficios en forma de capital, y la segunda es indirecta y más oculta, por la que estas empresas reciben toda aquella información de ciudadanos que son clientes de redes sociales, para la utilización en sus fines empresariales, realizando así un estudio de mercado y un seguimiento de sus clientes mucho más verídico y por lo tanto eficaz. Dos ejemplos verídicos para reflejar esta realidad:

Gobiernos: Actualmente las redes sociales sirven de sustituto de los antiguos espías de servicios de inteligencia, ahora si alguien resulta molesto para un gobierno solo hace falta buscar su actividad en redes sociales o conversaciones privadas, para encontrar aquel elemento comprometedor que sirva de herramienta para el chantaje y mantenerlo alejado y/o callado.
Empresas: Centenares de personas han presentado denuncias al darse cuenta que sus aseguradoras les habían aumentado el precio de sus recibos, cuando pidieron explicaciones ante sus empresas de seguros se dieron cuenta que estas conocían de su propia información sin que ellos se la hubieran notificado, esta la habían conseguido teniendo acceso al historial de sus búsquedas y a publicaciones en redes sociales, por lo que no requieren de más pruebas.

Al conocer todo este entramado, uno se pregunta ¿Por qué sí hay pruebas de estos hechos no se les pueden condenar por la utilización que hacen de algo privado? La respuesta es clara a la vez que preocupante, no hay delito si hay consentimiento para que se produzca la acción, y en este caso nosotros les autorizamos para que hagan lo que convenga con nuestros datos en el mismo momento que “leemos” y firmamos la política de privacidad, en todo ese texto interminable y propio de una cláusula hipotecaria, encontramos fragmentos donde legalizan estas acciones. Y aquí es donde radica el problema porque si al vacío legal que existe en el mundo de internet donde de momento no existe una jurisdicción a la que ceñirse para condenar delitos, le añadimos la falta de escrúpulos que existe actualmente en el mundo empresarial donde lo que prima es el máximo beneficio por encima de cualquier valor ético, obtenemos como resultado este flujo oculto de información entre empresas y gobiernos, mientras los usuarios nos sentimos realizados al compartir con amigos públicamente, vía redes sociales: nuestras preocupaciones, intereses, opiniones, condiciones laborales y sentimentales, o cuando en portales a los que otorgamos falsa confianza introducimos datos que no le daríamos ni a nuestros mejores amigos, en especial los bancarios con los que nos podrían desplumar en un segundo. Si el siglo XXI que está construyendo la interrelación  entre personas de todo el mundo mediante redes sociales sirve para que empresas puedan tener mayores beneficios, y los estados nos tengan mucho más controlados en base a sustraer nuestra privacidad, recuperaría a Groucho Marx para decir: ”Paren el mundo que yo me bajo”.


Félix Valle

viernes, 17 de enero de 2014

El esperanzador Gamonal

Esta semana ha estado en boca de todos un barrio de Burgos, y sorprendentemente por la época del año que estamos la noticia no iba referida con las temperaturas de la ciudad burgalesa, sino con una protesta vecinal en el distrito vecinal de Gamonal un barrio de clase obrera conocido en la ciudad castellana por sus reclamaciones a lo largo de los años. La protesta tiene su origen en un plan urbanístico de la ciudad gobernada por el Partido Popular por el que se pretende reestructurar la principal avenida comercial del barrio para convertirla en un boulevard, es decir una avenida con una vía en cada dirección y con un carril bici que transcurra por medio, brillante idea esta última poniendo a los ciclistas entre medios de los coches dado el gran respeto que hay por los ciclistas en vías urbanas en este país, pero quitando errores de proyectos propios de Calatrava. El gran malestar vecinal con este proyecto venia de la supresión de plazas de aparcamiento gratis a nivel de carretera, para construir un parking subterráneo a 20.000 € la plaza, vamos un buen pelotazo urbanístico que le iba a salir a Burgos por 8 millones de euros, seguramente era la mejor manera de gastarlos en el contexto actual. Y todo esto sin ni una previa reunión con los vecinos, sino con una mera aprobación con el consejo vecinal de turno que en muchas ocasiones funcionan por mero clientelismo con el gobierno.

La noticia no es el estupendo plan urbanístico, porque toda buena ciudad española tiene uno similar a este en forma de remodelación urbanística, sino que esto ha salido a luz por la protesta vecinal que sin ver un futuro laboral próximo no iba a consentir tal proyecto. Esta noticia me ha servido para reflejar en la práctica varios de los elementos que he ido mencionando en diferentes artículos:

1/ Sin protesta social no se consigue un cambio: Actualmente están surgiendo formas de protestas virtuales, yo destacaría change.org un portal de internet donde se firma por diferentes peticiones y que ya tiene a sus espaldas algunos méritos, ya que en varios casos han conseguido los objetivos que perseguían. Ahora bien este método nunca debe ser sustitutivo de la manifestación en la calle y sí complementario, porque en la calle es donde los políticos ven realmente el gran descontento ciudadano, aunque muchas veces lo menosprecien saben que a largo plazo no pueden mantener esta queja del pueblo, porque la lógica de votos en la que piensan los gobiernos lo hace inviable. La clara forma de menosprecio o deslegitimación que utilizan en estos casos es señalar las acciones de protesta como violentas, para esto cuentan con los grandes medios que le hacen un gran servicio en esta función.

2/ Intentaron apaciguar la disconformidad social mediante el miedo y la represión: Las protestas se iniciaron la noche del Viernes 10 y se fueron prolongando a lo largo de la semana, pero la noche del Sábado 11 ya se produjeron las primeras detenciones al prever el gobierno que la protesta podría ir a más, esta acción policial tenía una clara finalidad, que no es otra que la de intimidar y provocar que la manifestación se redujera en número de participantes, al ver que el resultado fue el contrario empezó a surgir el desconcierto en el gobierno que se reflejó a la semana siguiente en el anuncio de la paralización de las obras. Casualmente la noche de las detenciones no fue en la que se produjeron más altercados pero estratégicamente si era la más importante a la hora de disuadir.

3/ La permanencia es la forma de conseguir resultados: El barrio del Gamonal tenía claro su objetivo y supo permanecer impasible ante las acciones policiales que pretendían el abandono en esta idea. El agachar la cabeza solo hubiera llevado a la viabilidad del proyecto, y cualquier acción de protesta previa hubiera sido borrada con el tiempo. En cambio la fuerza que han demostrado estos ciudadanos siempre perdurara en la ciudad, y el gobierno sabe que será difícil volver a plantear algo sin una previa consulta a los ciudadanos que aquí perviven.

Si esta protesta no se hubiera llevado a cabo, en unos años tendrían un proyecto urbanístico aprobado que en ningún momento habría tenido la legitimación de los vecinos, así que hubiera ocurrido lo que ha venido pasado a lo largo y ancho de este país en las últimas décadas. Y aunque hay que ser precavido y tener los pies en la tierra teniendo en cuenta que esta protesta es a nivel vecinal, espero que pueda sembrar una base en el inconsciente colectivo de cara al futuro, al menos que se recuerde que a nivel municipal, la fuerza de la reivindicación todavía sigue teniendo fuerza y eficacia.


sábado, 11 de enero de 2014

La era de la desinformación

Desde la universalización de internet se dice que vivimos en la era de la información ya que disponemos de una cantidad inimaginable de información solo al alcance de un click, tenemos a nuestra disposición todas las publicaciones del mundo en una pantalla, es decir ya no solo estamos informados por el ámbito periodístico que nos rodea sino que podemos expandir nuestro campo de información hasta donde alcance nuestro interés. ¿Parece una situación idílica, no? Sí que lo seria sino fuera por un factor: el hombre tiende por naturaleza a sacar la máxima satisfacción del mínimo esfuerzo, este comportamiento casualmente está llevando a que la sociedad preste menos atención a la información y este más desinformada porque la cantidad de noticias que recibe durante el día no es capaz de procesarla para su optimo entendimiento, pero en cambio se sienta plenamente informada.

Al iniciar el post he dicho que vivimos en la era de la información como dicen muchos, pero yo puntualizaría y más bien diría en la masificación de la información. Solo hace falta navegar un poco por internet para darte cuenta la de cantidad de noticias que surgen al minuto, y es verdad que la diversidad de opiniones es positiva para el conocimiento, el inconveniente es que actualmente internet es un mundo sin legislar donde todo vale y eso se materializa en la erupción de información sin contrastar o sin un origen claro, por lo que cualquiera es capaz de lanzar noticias a este campo. Esto genera una fuente de problemas si tenemos en cuenta la sociedad en la que vivimos donde la compasión por los demás brilla por su ausencia y donde el minuto de fama se paga al mejor postor.  

Y es que en la actualidad al estar sumergidos en este sistema de información nos encontramos con diferentes hechos a los que nos hemos acostumbrado, como el surgir de noticias explosivas que a la semana son olvidadas por completo, la cantidad de estudios que salen para legitimar diferentes acciones o como métodos de campañas publicitarias que llevan detrás una Universidad que corrobora ese estudio donde simplemente firman a cambio de una suma de dinero, noticias que tienen que ver con el parte meteorológico que acaparan buena parte de noticiarios donde cada año la situación es la más alarmante en décadas o el conocido como efecto Lázaro fenómeno que consiste en que una serie de noticias que se creían muertas vuelvan a resurgir a lo largo del tiempo con meros cambios para volver a salir a la palestra, como ejemplos de estas encontramos diferentes descubrimientos científicos, declaraciones impactantes de algunos cargos políticos, hallazgos arqueológicos que ponen en jaque la historia… Todas estas parecen que van a tener cierta relevancia pero tienen un resultado común, el olvido. Actualmente en la agenda informativa no intervienen solo los medios sino que en ella podemos interferir cualquier ser humano, para ello han sido claves las redes sociales que son un constante resurgimiento de noticias del pasado que solo con cambiar la fecha y un titular impactante vuelven a salir a la luz, en este proceso los clásicos medios de comunicación son un elemento relevante porque adquieren estas noticias como válidas y le dan su propia firma editorial sin antes haber realizado un mecanismo de contraste o validación.

Esta situación está llevando al desconcierto social, ya que en el momento histórico donde más información surge al alcance de cualquiera, menos somos capaces de retenerla. Esto está llevando a una falsa sensación de estar informados de diversos temas cuando más bien estamos desinformados de lo realmente importante, pocas de las informaciones que salen en los medios convencionales son realmente vitales para ser seres con capacidad crítica, más bien son noticias que interesan a diferentes grupos de poder tanto políticos, financieros como empresariales, ya sea para distraer nuestra atención, manipular nuestra forma de pensar mediante el adoctrinamiento, o ser clientes de diferentes empresas.


Nos estamos acostumbrando a compartir titulares, a exaltarnos por ver unas declaraciones salidas de tono o a unos datos alarmantes, pero este sentimiento que nos despiertan es sofocado a la mañana siguiente con otra cortina de humo. El periodismo sensacionalista está triunfando por delante de la reflexión, el análisis o la opinión fundamentada, actualmente un titular contundente o llamativo, es más leído que el artículo de grandes periodistas que por suerte todavía los hay.